¿Sabías que tu intestino y mente están más conectados de lo que imaginás?

Conexión intestino-cerebro ¿cómo la salud digestiva impacta tu bienestar mental?

Estos órganos están en constante comunicación a través de conexiones nerviosas, hormonas y señales inmunológicas, estableciendo una relación directa entre la salud digestiva y la salud mental.

A menudo escuchamos que «el intestino es el segundo cerebro». Esta afirmación refleja el creciente interés en el eje intestino-cerebro, y es que conforme pasan los años hay más investigaciones que estudian su relación.

Un componente clave de esta relación es la microbiota intestinal. Se ha observado que ciertas bacterias pueden influir en los niveles de serotonina y dopamina, neurotransmisores fundamentales para el estado de ánimo, la motivación, el sueño y la respuesta al estrés. Un desequilibrio en la microbiota intestinal puede afectar negativamente la salud mental, contribuyendo a aumentar la ansiedad y la depresión.

Las emociones como la tristeza y el estrés pueden alterar la composición de la microbiota intestinal, reduciendo la diversidad de bacterias beneficiosas y promoviendo la inflamación. Este desequilibrio genera un ciclo negativo: la inestabilidad emocional altera la microbiota, lo que puede llevar a problemas digestivos y, a su vez, intensificar el estrés.

Para mantener un equilibrio óptimo entre el intestino y la mente, es crucial cuidar el eje intestino-cerebro. Le ofrecemos cinco consejos prácticos que ayudarán a lograrlo:

  1. Consumir omega-3: este nutriente posee propiedades antiinflamatorias y se encuentra en pescados grasos, nueces y semillas de chía.
  2. Aumentar la ingesta de antioxidantes: alimentos ricos en antioxidantes, como frutos rojos, té verde y verduras de hojas verdes, ayudan a combatir la inflamación y a proteger tus células.
  3. Incluir pre y probióticos en la dieta: los alimentos fermentados como yogur, kéfir y kimchi, así como los alimentos prebióticos como frutas, verduras y granos enteros, pueden mejorar la microbiota intestinal y promover una mejor salud digestiva.
  4. Practicar técnicas de relajación: actividades como la meditación y la respiración profunda son efectivas para reducir el estrés y promover el bienestar general.
  5. Realizar actividad física regularmente: el ejercicio no solo mejora la salud física, sino que también libera endorfinas que benefician tu salud mental y emocional.

No olvidés consultar a profesionales de salud para obtener tratamientos más adecuados y personalizados.

Paula Zúñiga Arias
Nutricionista
CPN: 3307-23
pzuniga@automercado.biz

Referencias Bibliográficas:

  1. Bustos, L., Hanna, I. (2022). Eje cerebro intestino microbiota. Importancia en la práctica clínica. Revista de Gastroenterología del Perú42(2), 106-116. Epub 00 de abril de 2022.https://dx.doi.org/10.47892/rgp.2022.422.1438
  2. Sacristán, I. (2021). Influencias de la microbiota en el eje intestino-cerebro y el desarrollo de enfermedades. Trabajo de fin de grado, Universidad de Valladolid. Repositorio Documental de la Universidad de Valladolid. https://uvadoc.uva.es/bitstream/handle/10324/48217/TFG-M-N2381.pdf?sequence=1&isAllowed=y
  3. Gómez-Eguílaz M, Ramón-Trapero JL, Pérez-Martínez L, Blanco JR. (2019) El eje microbiota-intestino-cerebro y sus grandes proyecciones. Rev Neurol 2019; 68: 111-7. https://summaremeis.com/evidencias-clinicas/glutazinc/22.pdf